Suelen haber combinaciones de circunstancias inevitables, incluso imprevisibles, que provocan acontecimientos inesperados: “he quedado con unos amigos para cenar en un sitio que no te puedes perder, vente!”
Horas más tarde y tras unas papas arrugas, croquetas de gustos incomparables, exquisitos quesos, deliciosa cecina y un sorprendente tatin con foie… todo ello bañado en deliciosos vinos o sorprendentes cervezas…. En ese momento, alguien recoge, alguien saca un tapete y empieza un show que promete ser único.
Si, estamos hablando del Celler Cal Marino. Y si, hablamos de una cena de amigos que se convirtió en un espectáculo de TotMagia desde muy cerca.
Dicen que la casualidad es lo que ocurre por azar y la causalidad es lo que ocurre como resultado de una serie de causas. No sabemos porque ocurrió, pero lo que sí sabemos es que volverá a ocurrir.
Os dejamos con unas fotos de los mejores momentos.
¡Gracias a Jose Dela por estas imágenes!